Suplantar la figura del médico se paga con un año y medio de cárcel

 Redacción Médica, 12 de Diciembre, revista digital.

Ha ejercido durante cinco años como médico en varios centros de salud de la Sierra de Huelva

El Juzgado de lo Penal número 4 de Huelva ha condenado a un año y medio de prisión por un delito de intrusismo profesional a un hombre acusado de utilizar un título falso --de la Universidad de Murcia, por lo que también fue condenado en 2011 Cartagena por falsificación en documento oficial--, y hacerse pasar y trabajar como médico en centros de salud de varios municipios de la Sierra de Huelva entre 2009 y 2014.

Según reza en la sentencia el juez también lo condena, en concepto de responsabilidad civil, al pago de una indemnización al Servicio Andaluz de Salud (SAS), de la Junta de Andalucía, por valor de 80.134,72 euros. Este servicio ejerce también de acusación en este proceso, junto al Colegio de Médicos.

En la sentencia, dictada tras alcanzar una conformidad entre las partes, se acuerda la suspensión de la ejecución de la pena de prisión por un plazo de dos años, la cual queda condicionada a que el referido penado no vuelva a delinquir en el plazo indicado y a que abone la responsabilidad civil.

El juez considera probado que, entre el 1 de julio de 2009 hasta el 30 de septiembre de 2014, el acusado fue contratado por el SAS, mediante diversos contratos eventuales, para prestar los servicios de médico en dispositivos de apoyo y zonas básicas de salud de Huelva, para lo que aportó solicitud, junto con el cuestionario cumplimentado con sus datos personales y profesionales y su currículum.

En el mismo refería que era licenciado en Medicina y Cirugía por la Universidad de Murcia desde 2006 y aportaba copia de un documento que contenía la certificación que hacía una supuesta jefa del servicio de la secretaría de la facultad de Medicina de la citada universidad.

A su vez, ese título llevaba incorporada una diligencia de un notario de Almendralejo que certificaba que esa copia coincidía con su original sin que fuera cierto, pues el propio acusado era el que la había confeccionado para dar apariencia de verdad, hecho por el que ya fue condenado a seis meses por un juzgado de Cartagena por un delito de falsedad en documento oficial.